Una imagen vale más que mil palabras, sobre todo si esa imagen procede de una cámara maldita y te presenta un futuro espeluznante. El futuro de Julie no tiene muy buena pinta. ¡Ni el de nadie que se ponga delante del objetivo! Las cosas empiezan a mejorar cuando Julie va a Horrorland, hasta que entra en el Túnel de los Gritos…