Una sorprendente combinación de novela negra y novela histórica. En Munich, el nuevo comisario de asuntos políticos, Müller, acaba de detener al líder nazi, Hitler, tras su intento de golpe de estado y el robo de varios billones de marcos del Banco de Alemania. Con los nazis controlados y los comunistas amedrentados por sus últimas derrotas en la calle, Müller parece respirar tranquilo. Pero aparecen asesinados dos personajes: Strahler -secretario del alcalde—, y el fiscal Seidl.