Olivia Millán acaba de perder a su abuelo Eusebio, quien le deja como herencia el hotel California, un destartalado establecimiento en la Costa Brava. Aunque aceptar su última voluntad implica una condición: Olivia deberá asumir la dirección del mismo junto con un reputado ejecutivo del sector, un tal Álex Martí. El mismo día en que debe presenciar la lectura del testamento, Álex ha de viajar a San Francisco para recuperar a una mujer de la que se ha enamorado, y sólo podrá hacerlo si Marc, su gemelo, se hace pasar por él... Marc acepta el cambio de identidades a regañadientes y acude al hotel California dispuesto a encontrar el modo de salir cuanto antes de ese embrollo, aunque después de ver a Olivia decide que si el destino se ha atrevido a darle una nueva oportunidad, él va a aferrarse a ella con uñas y dientes.